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MATLACHINES

MATLACHINES

180No hay datos confiables sobre el origen de la palabra. Matlachines, según Arturo Warman en su libro “La Danza de Moros y Cristianos” nos dice que es un vocablo, al que la Academia da un origen árabe, de matauchihin, que significa enmascarado. esta teoría habla que fue adaptacion por los españoles para bautizar las danzas de indios, caracterizadas por el uso de máscaras.

Etimológicamente matlachin, proviene de matlatl, que significa red; tzin es diminutivo, y co igual a lugar, es decir “lugar de redes pequeñas”. Otra fuente dice que la palabra proviene de malacate, es decir el que gira, malacatonzines, los que dan vuelta, por corrupción del vocablo, matlachines. otra diferente versión más nos dice que el nombre deriva de matlazinca, se toma el nombre de este grupo y deriva hacia el nombre de “matlachin”.

 

 

DANZA DE MATLACHINES EN AGUASCALIENTES

“Cuentan algunos de los primeros danzantes en el estado (Juan Arenas “el Caneo” y Alejandro Vargas) que el iniciador de esta danza en Aguascalientes fue don Bernabé Félix el cual era de origen zacatecano y en un tiempo fue ferrocarrilero, el papel que en un inicio desempeñó don Bernabé fue el de tamborero, la danza que él formó *Los Chichimecas para la Santa Cruz de los Buenos Aires* se componía por gente trabajadora en su mayoría adulta ya que no permitía a niños (porque le estorbaban, como él lo decía), el violinista era Don Luis Martínez, el cual fungió en este puesto hasta el año de 1950 cuando Don Julio (El querer y no) le quitó el puesto”.

Después de estas danzas surgieron una gran cantidad de grupos:

La danza de don Lucio García
Los Rojos de Arturo Zedillo (Barrio del Llanito)
Los Aztecas del Gran Jefe Juan Mireles (Barrio del San Felipe)

Del grupo de los Aztecas surgieron los siguientes grupos:

Tenamaxtli
Los Venados
Los Toltecas
Los Olmecas
Los Mayas
Los Chichimecas”

FUNDADORES DE LA DANZA DE MATLACHINES
EN EL ESTADO DE AGUASCALIENTES.

Danzantes.
Irineo (El Rocha)
Antonio Santos
Juan Mireles
El “Güero Parafinas”
J. Carmen Montes
Miguel Vargas
Bernardo (El Becerro)
Juan Arenas García (El Caneo)

Existe en el estado de Coahuila una variante de la danza de matlachines, a esta se le ha asignado el nombre del barrio en el que se interpreta, es decir: Danza del ojo de agua .

En innumerables ocasiones se le ha llamado *danza Tlaxcalteca del Ojo de Agua*: acudiendo a los datos históricos de nuestro país, sabemos de la migración de grandes grupos de personas procedentes del estado de Tlaxcala hacia el norte del territorio mexicano, hacia el actual estado de Coahuila, llevando con ellos gran parte de su cultura, usos y costumbres, de ahí que el famoso sarape de saltillo tiene su origen en el estado de Tlaxcala, pero es Coahuila quien lo adopta y lo da a conocer; dada la similitud entre las dos danzas mencionadas, se podría pensar como posible lugar de origen el estado de Tlaxcala, que al paso de los viajeros la dejaron en Aguascalientes, o que una vez establecida y arraigada en Coahuila se difundiera hacia territorio hidrocálido.

Si esta opinión pudiera tener algo de valor, lo perdería de inmediato al preguntarnos: Si Tlaxcala es el lugar de origen de esta danza ¿por qué ya no se baila en ningún lugar de este estado? ¿Por qué ya no existe ni la más mínima variante de ella en esta región? No existe informacion exacta del origen de esta danza.

COMUNIDADES DONDE SE EJECUTA Y FECHAS

Esta danza se ejecuta en todos los municipios del estado, la ejecutan muy parecido, aunque no igual, existen muchas variantes, pero predominan más las semejanzas.

En Aguascalientes (municipio) se ejecuta en diferentes barrios de la ciudad, en el estado se interpreta en todas las cabeceras municipales, en comunidades grandes y en muchas rancherías.

La podemos presenciar en los acontecimientos católicos más importantes, 3 de mayo, día de la Santa Cruz, 5 de febrero se celebra con grandes festejos a San Felipe de Jesús, el 15 de Mayo, San Isidro Labrador, 15 de Agosto en la ciudad de Aguascalientes, fiestas de la Asunción de María, patrona de la ciudad, en todo el Estado, el 12 de diciembre y lo raro e increíble, nunca se baila el 25 de Abril, durante la feria de San Marcos, siendo que alrededor de esta fiesta tradicional, nació y creció propiamente Aguascalientes.

LA COREOGRAFIA DE LA DANZA DE MATLACHINES

Al intentar definir el término “coreografía” diremos que es el conjunto de movimientos o desplazamientos que un conjunto de bailadores o bailarines realizan en un espacio escénico.

Dentro de la danza de matlachines, la coreografía natural y tradicional predominante es la que se integra en cuadrilla, dos líneas paralelas con un capitán al frente de cada una de ellas, ellos serán los encargados de indicar la pisada y de dirigir el movimiento de ida y vuelta de las filas, al finalizar cada evolución, se repite el recorrido pero con un paso más suave al que le llaman descanso.

Existen otros sones con coreografía específica y que no es precisamente la de ida y vuelta, por ejemplo: la viborita, los caballitos, de cuatro en fondo, etc.

LA ESTRUCTURA DE UN SON DE MATLACHINES

Los sones de esta danza tienen una estructura definida, aunque respetan una coreografía y pasos específicos en algunos casos.

El son inicia invariablemente con un movimiento llamado cortesía, consiste en hacer un saludo hacia los cuatro puntos cardinales (según la cosmovisión de los indígenas) o santiguar el espacio y a la danza (según los evangelizadores). Después de la cortesía se realiza un paseo a manera de introducción, generalmente son cruces con el compañero de enfrente y/o con el de a lado; concluidos estos dos movimientos se realiza un paseo o descanso avanzando por el interior de las dos filas, al regresar a su lugar se realizaran una a una las pisadas propias del son intercalando un descanso entre ellas y por último se vuelve a hacer la cortesía indicando el final del son.

CLASIFICACIÓN DE LOS SONES SEGÚN SUS PISADAS Y SU TEMA.

Tratando de comprender mejor esta danza, el profesor Francisco Javier Sánchez López, propone la siguiente clasificación, como una aportación, para las futuras generaciones y aunque no descubre con esta el hilo negro (según sus propias palabras) y no encontrando otros antecedentes, valga ésta.

SONES ANTIGUOS

La característica de estos sones es la siguiente: después de la cortesía y de la introducción, se empieza con una pisada sencilla, la cual utilizan para hacer su coreografía natural de ida y de vuelta, sobre esta pisada agregan una nueva pisada (o adorno), y luego otra, hasta llegar a bordar una serie de pisadas siempre iniciando con la primera, desarrollando una memoria privilegiada, ejemplo: El Voraz, El Borracho, El Salinas, El Zacatecano, etc.

Por lo general se bailan en forma lenta, lo que permite asentar más limpiamente la pisada, desde luego dibujarla mejor.

Es falso que la característica de los Matlachines de Aguascalientes, sea la rapidez,, varios grupos la siguen conservando lenta, pero muy fuerte.

SONES NUEVOS

Estos sones no llevan una secuencia, como los anteriores, la pisada, con la que inician los capitanes, los demás danzantes los repetirán, es raro que en fiestas diferentes, lo bailen de igual manera, la creatividad en toda su extensión, hace acto de presencia, hasta en el nombre son nuevos, el Llanero Solitario, el Tapatío, etc., son además muy rápidos y con mucho grado de dificultad, cabrían dentro de esta clasificación los sones de “corridito” los cuales aceptan fácilmente cualquier pisada.

JUEGOS DE MATLACHINES

Quizá la máxima clasificación y la más sorprendente es ésta: los danzantes sin conocer el significado de la recreación y el funcionamiento fisiológico de su organismo, se hacen, al ejecutar estos sones, verdaderos maestros del arte de ocupar el tiempo libre y del mantenimiento de su cuerpo.

El segundo de los tres días que bailan, el domingo, que es día de fiesta y descanso por tradición (en Rincón de Romos, Ags.) por la tarde sus bailes, además de dedicárselos a la Santa Cruz, danzarán para las familias, sones exclusivamente recreativos (de alegría, de relajo). El número uno, es el son de la Viborita, le seguirán el Torito, los Caballitos, las Guerrillas, el Encadenado, el Corriente, Las cuchillas, etc.

Lo ideal sería describir cada uno de estos juegos, pero el espacio no sería suficiente, en ellos, en los juegos, encontramos su modo de ver, lo bueno y lo malo de la vida, como en el son de la viborita; o trasladarnos hasta una corrida de toros o una carrera de caballos

CUADRILLAS

Otros grupos alternarán estos juegos, para “descansar”, con sones rápidos y de pisadas fuertes, también para aguantar, interpretarán las cuadrillas, en donde sólo ejecutan un paso y van tejiendo bonitas y sencillas coreografías, (los dos capitanes, inician sus evoluciones, con los dos compañeros de atrás, todos los demás no bailan; luego seguirán con los danzantes que van en tercer lugar y poco a poco integrarán a toda la “cuadrilla”, como el son de cuatro en fondo, cuadrillas de Don José, e infinidad de sones, muchos de ellos sin nombre.

SONES COMPUESTOS

La característica de estos sones, es la composición de varias pisadas básicas, sencillas y redobladas hasta formar un solo paso. En donde he encontrado estas variantes es en los grupos jóvenes que después de haber asimilado lo aprendido de sus maestros y para distinguirse, le agregan o descomponen la pisada de acuerdo a su temperamento y creatividad.

ESTRUCTURA DE UNA CUADRILLA

Una cuadrilla de danza de matlachines se encuentra al mando del JEFE DE LA DANZA que es la persona de mayor autoridad y maestro de la danza.

En la formación de la cuadrilla, al principio y al final de cada línea se ubica un capitán, siendo de mayor jerarquía los que se encuentran al frente.

Atrás de los capitanes del frente y frente a los capitanes de atrás se encuentran las “barriguillas”, que son los danzantes más experimentados después de los capitanes.

Entre estos cuatro elementos de adelante y atrás se colocan los contra barriguillas, que son todo el grueso de danzantes y que se pueden presentar en número indefinido.

Además de los integrantes de la cuadrilla tal como la hemos descrito, existen otros integrantes, que aunque no son danzantes son parte vital de una cuadrilla:

Los músicos (violinista y tamborero)
Los huaracheros
Los viejos de la danza
El conjunto de familiares

POSICIÓN Y ACTITUD

La actitud de los danzantes durante el desarrollo de la danza será, de completa seriedad, pero reflejando vitalidad, alegría. El cuerpo suelto sin ninguna tensión, que origine cansancio, importantísimo para aguantar danzando dos o tres días sin agotarse.

Las pisadas deben ser abajo, es decir sin brincar, danzar asentando el paso es característico de los buenos danzantes.

Flexión de piernas, vista al frente, media flexión de la cintura, con la mano izquierda toma el arco, colocándolo en la cintura, en la parte posterior, con la mano volteada. Con la mano derecha tomará el guaje, yendo hacia abajo, irá al frente sin tapar la cara.

“Son muy importantes las angulaciones de algunos danzantes cuando usan el machete y cuando en algunos sones hacen movimientos llamados balanceo de brazos, piernas, tórax y muslos”.

“Aparte de las angulaciones debemos comprender el estudio del uso y ritmo de cada uno de ellos, ritmo que a veces va de acuerdo con el movimiento de los pies y a veces lleva el contratiempo con la sonaja” (Torreblanca).

LOS VIEJOS DE LA DANZA

Respeto, experiencia, ofrenda, burla, habilidad; en sí este personaje encierra muchos secretos, en algunos casos quien lo encarna es, o fue el mejor danzante, prueba y demuestra que sabe hacerlo, de un buen humor exagerado, pues es la alegría de los chicos y grandes. En algunos sones ocupa el papel principal, esto es, alrededor de él se desarrolla el tema de la danza.

Su papel, es muy variado:

1. Cuida que la gente que observa no invada el terreno donde se está ejecutando la danza.
2. Corrige algunos danzantes.
3. Los junta cuando después de un descanso, inician otro son.
4. Juega y hace travesuras, con los otros viejos de la danza.
5. Ridiculiza al personaje, las noticias o los hechos del momento.
6. Hace participar al público, con el cual hace bromas, les da a besar a su muñeca, para luego salir corriendo, pegando brincos y gritos.
7. Tiene la capacidad para suplir a algún danzante lastimado sea cual sea su lugar.
8. Es quien autoriza salidas o entradas a la cuadrilla
9. Se encarga de reparar algún desperfecto en la utilería de los danzantes.

En fin, su poder creativo es enorme, al grado que muchas veces roba atención, a los danzantes. Pocas veces sucede esto y en este caso los danzantes deberán redoblar su arte para no hacerse menos.

La función de los viejos de la danza, dice Electra y Tonatiuh

“Es el de restarle solemnidad al ambiente para que las cosas no se tomen demasiado en serio y prevalezca un clima festivo. Son, pues, los que proveen el humorismo en la fiesta, a veces sigue alguno de los danzantes, imita sus movimientos en forma grotesca; se persiguen y juegan entre sí o hacen partícipes de sus travesuras a la concurrencia”.
“En algunas ocasiones, los “campos” son los que indican el cambio de un paso a otro, durante la danza, pero, generalmente, sus movimientos son libres no siguen un patrón establecido, sino dejándose llevar por la inspiración del momento, con la cual mantienen el interés y el regocijo de los espectadores”.

Existen otras versiones en cuanto su contenido, esto es que el viejo de la danza representa el mal, porque siempre está tentando a que los danzantes se equivoquen o aconsejándolos que se porten mal.

La otra que simboliza al extranjero que siempre ha sojuzgado al mexicano y en esta persona (el viejo) se vengan los danzantes, vistiéndolo ridículamente.

Su vestuario varía mucho, desde la improvisación hasta la perfecta realización del mismo, sobre la cabeza, una cachucha, sombrero de charro, peluca de mujer, etc. Su vestido lo confeccionan a veces con costales de ixtle, hombres vestidos de mujer en forma exagerada, un huarache y un zapato viejo, pantalón parchado al que cuelgan corcho latas planas y mil combinaciones más.

En la mano derecha un látigo o chicote para auxiliarse en su trabajo, haciéndolo tronar magistralmente, en algunas ocasiones coloca colgando en la espalda un animal disecado.

“Siguen llevando como entonces un animal disecado: culebras, ardillas, zorrillos, conejos, etc., con los que ejecutan (ahora sin conocimiento de su significado real) los movimientos tendientes a espantar los malos espíritus que pudieran perturbar la danza”. (Torreblanca).

La Máscara que utiliza, con expresión chusca, graciosa, representando un personaje, refleja muchos estados de ánimo; pueden elaborarse de madera, de pasta de papel o ya comerciales de plástico.

“La naturaleza del portador se impregnaba así la del ser representado por la máscara eleva al portador por encima de los demás, indicando que está revestido de poderes sobrenaturales” (Electra y Tonatiuh).
Por último en la mano izquierda una muñeca que representa a la Malinche: Personaje polémico dentro de nuestra danza mexicana; que si fue una heroína o una traidora, en la Danza de los Matlachines se dice que se le toma por esto último; una muñeca fea, sucia, vieja a ella le pone a bailar, le pega porque no aprende lo que se le enseña, cuando alguien del público está descuidado se la da a besar.

VESTUARIO

PARTES EXTERNAS

1.- Nagüilla, mandilillos o faldillas.- Con estos nombres según el grupo se conoce la prenda que llevan en la parte inferior los danzantes, es casi siempre de color rojo, por lo general utilizan la franela con forro de manta, aunque últimamente se consiguen otras telas sintéticas de mayor resistencia como la terciopana. Ésta se confecciona en dos partes, totalmente separadas, la medida de lo ancho, es nuestro frente de cintura, más de cinco centímetros; a cada lado para que cruce, lo largo es aproximadamente de 75 cm.; más 6 cm.; de la última hilera de carricillos y 10 cm.; de carnaza o rapacejo que cuelga en la parte inferior (para gente más o menos de altura, subir o bajar a los primeros 75 cm.).

Esta enagüilla lleva diferentes figuras como: aves, mariposas, flores y otros, según la imaginación del danzante. Las figuras van tapizadas con lentejuela bordada, en otros combinan la lentejuela y chaquira, los colores van de acuerdo a la creatividad y uniformidad del grupo.

Los 75 cm.; los dividen en una franja bordada con lentejuela y chaquira y otra franja en hilera de carricillos que van de 6 a 8 cm., algunos danzantes han cambiado el carrizo por popotes de plástico, más duraderos quizá, menos tradicionales.

La forma de amarrar este carrizo, es utilizando cáñamo, que entra, se remata, o se fija con: semillas de colorín, botones de plástico, cuentas de vidrio, motitas de estambre, figuritas de hojalata u ojillos que utilizan los zapateros, saliendo por donde entró el mismo hilo.

Cuentan que antiguamente estos adornos eran de metales y piedras preciosas.

Esta prenda sin dividirla, encuentra semejanza con la de concheros antiguos, estas dos partes las une algunos danzantes, y en algunas regiones, por medio de un cordón, amarrando sus partes laterales.

2.- Penacho, corona o monterilla.- Adorno con 7 plumeros o chilillos en todos los grupos de la ciudad y nueve u once plumeros en Rincón de Romos. Utilizan plumas de guajolote de preferencia, aunque por su escasez y costo emplean plumas de pollo seleccionadas, estas van sobre un cincho de fleje o cierra cinta amarradas en forma singular en los grupos de la ciudad y solamente a los lados, lateralmente, en los grupos de Rincón de Romos.

Van pintadas al gusto, por lo general dominan los colores nacionales, el procedimiento más común para pintar las plumas, esta se lava con agua fría y jabón natural, para que suelte la grasa, luego sobre poco agua hirviendo, con poquita sal, se echan las plumas por un momento, se vaciará la anilina ya disuelta y se mezclará todo, poniéndolas luego a secar con el sol y el viento. Cada danzante tiene su secretito para que queden mejor pintadas las plumas.

Complementa este bellos trabajo en pluma, herencia también de los pueblos prehispánicos, el bordado total del penacho, en lentejuela y chaquira, además las figuras que sobresalen, coinciden en las bordadas en la enagüilla y chaleco, llevan además hilos con chaquira, canutillo o cuentas de papelillo que caen sobre la frente, para ir a parar a los costados dando idea de cortinas, este rango coincide en una de las formas árabes de cubrirse en parte la cara, también le colocan vistosas orejeras y en la parte posterior, cuelga una trenza, forma natural de llevar los indios el pelo y posiblemente lleve un simbolismo, antes era de crin de animal, ahora de lana o estambre.

Esta prenda es la más difícil de elaborar, sobre todo, amarrar la pluma.

3.- Chaleco, corpiño o maya.- Este chaleco tiene el corte de una camiseta holgada abierta en la parte de atrás, diferencia importante con los matlachines de Zacatecas o Chichimecas de San Luis Potosí que va abierto en la parte de adelante.

Va también bordado en lentejuela y chaquira, sobresale la figura que coincidirá con las enagüillas y penacho. En la parte inferior una hilera de carricillos rematados con tiras de gamuza o rapacejo, que caerán en la parte superior de las enagüillas.

4.- Faja. (cotense, faja bordada de manta, Lucio)

“Se confecciona también en telas augusto, la medida es de 10 a 12 cm. De ancho y de 3 a 4 cm. de largo, se usa en la cintura, después del pantalón y de las faldillas”

Algunos grupos la utilizan, agregándole en las partes laterales, unos colgantes del mismo material.

Algunos grupos sustituyen el chaleco por la pañoleta, acción que no se debe hacer, en la parte de la cintura, el patío complemento de ornato, aunque algunas versiones de los danzantes afirman que no era parte del atuendo sino le prenda en la que envolvían y trasladaban su traje.


PARTES INTERNAS

1.- Pantalón Corto.- Va debajo de la enagüilla, llevan bordado en los costados o bien una pantalonera de satín que llega debajo de la rodilla. Generalmente en la ciudad de Aguascalientes es color negro.

2.- Camisa.- Prenda de estilo normal, confeccionada en telas brillosas, generalmente de satín en color rojo, algunos grupos la han exagerado al agregarle unas mangas muy abombadas.
3.- Medias.- Llevan medias rojas de popotillo, por lo difícil de conseguirlas a veces, utilizan medias deportivas

 

COMPLEMENTOS

1.- Sonaja.- Hecha de bule o guaje, pintada al gusto, va hacia abajo y nunca deja de moverse, sólo cuando en algunos sones se hace sonar el arco. Cuando se elabora, algunas gentes le cruzan por dentro alambre cobrizado o puntas de espina de maguey y para hacer su sonido más agradable y más fuerte, llevan en la parte interior piedritas de hormiguero.

Siguiendo a Lázara Mendiu:

“Como complemento (la sonaja) es llevada la generalidad de las veces para sostener el equilibrio del danzante proporcionando a los movimientos de los brazos: seguridad, belleza y elasticidad”.
“Como símbolo es de tomarse en cuenta su cabal contenido: ya que la danza es una conjugación de valores, estéticos, místicos, litúrgicos, en sí la sonaja encierra un hermoso contenido mágico”.

2.- El Arco.- Este complemento nos da clara información del origen de esta danza, prehispánica, de carácter guerrero. Este procura hacerlo de maderas sonoras y va pintado por lo general en forma horizontal de verde, blanco y rojo, en algunos sones lo hacen sonar.

Va en la cintura en la parte de atrás, algunos lo llevan con la mano volteada, o en forma natural, otros lo llevan libre o suelto.

3.- El Escudo.- Algunos danzantes llevan un pequeño escudo en el antebrazo izquierdo hecho de hojalata, sobre él una imagen de la virgen o bien en el centro un espejo y pintadas grecas a su alrededor. Otro símbolo del carácter guerrero de esta danza.

4.- Pañoleta blanca.- Algunos danzantes la llevan sobre la espalda y anudada al cuello, y otra en la parte posterior de la cintura, que llaman cotense o patio, lleva bordado a mano o máquina, la virgen, otras figuras o simplemente las iniciales de sus nombres.

5.- Las Polainas o Correlleras.- Rectángulo de carnaza de aproximadamente 30 cm., de largo por lo ancho de la pantorrilla. En la parte posterior se dejan unos 5 cm. y se corta en tiras de 1 cm, poco más o menos, se amarra en la parte inferior de la rodilla, simulando unas polainas.

Probablemente para imitar las grandes botas de los españoles.

6.- Los Huaraches.- Para protegerse de las inclemencias del suelo el hombre inventó el huarache, sencillo como la propia vida de los hombres que los usan. Así es nuestro huarache, el huarache de tres agujeros o zacatecano, sujetan las tres suelas de vaqueta una tira de piel que se atraviesa entre los dedos y se ajusta al talón en forma tal que no puede desprenderse fácilmente, dando flexibilidad al danzante que lo sabe usar.

Las suelas de baqueta es el lujo y lo caro de esta prenda; en la parte superior del huarache una tapa o copete que muchas veces va adornado con estambre, dando idea de motitas cocidas a este copete y por último en la parte de abajo, donde inicia la correa que fijará todo el huarache un estoperol, especie de clavo en forma de arco.

MÚSICA

“El danzante tiene muy adentro la música de la danza, es parte de su vida. El músico lleve muy adentro la danza, la siente, la quiere, la entiende, la vive y la sabe” (Marcelo Torreblanca)*.

Los instrumentos musicales tradicionales, donde se conjuga también lo indígena con lo español; el violín y la tambora.

Los Matlachines danza mestiza, con hondas raíces culturales, heredó de las dos corrientes de su formación, la exquisita sensibilidad mística de las grandes culturas precolombinas que fincaron sus valores estéticos con los Olmecas, Mayas y Aztecas.

De ellos heredamos el monótono tañer del huehuetl y el lúgubre ritmo del teponaztle, convertidos ahora en nuestra sonora “tambora.”

La otra rama, la hispánica, extiende sus horizontes culturales en los albores de la legendaria Babilonia y se nutre con el devenir del tiempo en Egipto, en Roma, en Grecia y en 800 años de dominación mudéjar. Por este conducto viene el violín, tal y como se conoce hoy en día, se creó en Italia hace unos quinientos años.

“Violín y tambora son los instrumentos característicos de la danza de arco, sonaja y carrizo, en algunos lugares se utilizan una o dos tamboras o también, uno o dos violines, lo tradicional, es un violín y una tambora”.

Los músicos ejecutan infinidad de sones, a la fecha no existe una clasificación, es probable que pasen de los 100 sones fácilmente; desgraciadamente, algunos sin nombre. Entre los más conocidos; el Meco, el Voraz, el indio, el Cangrejo, el Degollado, la víbora, etc.

Por lo general su forma musical consta de dos partes, que se repiten infinidad de veces. Entre grupo y grupo, región y región se repiten los nombres de los sones, pero no es la misma forma musical, y lo que los distingue también es su estilo.

Contribucion: Profesor Francisco Javier Sánchez López, MAESTRO Juan Arenas García gracias por su entrega y dedicación.

PROFR. JORGE SANCHEZ CLELO

BIBLIOGRAFIA